Hoy tengo menos tiempo que nunca, visto lo visto, acabo de llegar a casa y me toca actualizar a mí, Alba.
Se acercan los exámenes finales, la puesta de bandas, las subidas/recuperaciones y la jodida selectividad. Tengo más miedo que un pollo a punto de morir.
Pero bueno, no venía a hablaros de eso, quería contaros un poco la sensación de hacerse un piercing.
Empecé con la aventura de los piercings en sexto de primaria, con el pendiente del cartílago. ¡Qué aventura ir a la tienda y decirle, ¿puede hacerme el pendiente? uwcvnoweiea!
Después de ese vino el de la nariz, que éste es posible que me lo hiciera en una tienda unas dos veces y después me lo abriera otras dos veces yo misma (cosa que sinceramente no recomiendo porque te dejas la nariz que se te ve el agujero pa'siempre).
A continuación vinieron unos 4 seguidos a continuación de la oreja derecha, que ya no tengo porque lo vi demasiado bestia y ciao. Otro que me hice fue el del ombligo en 4 de la ESO, que aún sigue conmigo y durará mucho, muchísimo.
Terminé por hacerme el septum y otro; mmm, creo que no se me olvida ninguno. Ah sí, me hice el tragus, que me lo volveré a hacer muy pronto porque me encanta, me enamoré al vérselo a mi chubbyta y quiero tenerlo de nuevo jiji Y además me encantaría el de la lengua normal y el que va en horizontal tanto en medio de la lengua como en la punta, es que estos 4 pendientes serían mi pasión cbhyerieudjweo *-*
Bueno, todo ha sido super rápido y fatal de tiempo pero bueno... Otro día os pondré una foto de cada uno, que ahora mismo no tengo fotos en el pc.
Un besito a todos <3
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